jueves, 6 de marzo de 2008

Yo también quiero mi canica!


A estas alturas de la película, quien más quien menos se ha visto envuelto en la maravillosa odisea de comprarse un piso.
Cuando te compras un piso, bien sea solo o acompañado de una pareja o lo que sea, te vuelves loco.
Primero te toca elegir zona y te plantas en una inmobiliaria y lo comentas como tímido, no? Cosa que no entiendo porque encima que les vas a endosar como mínimo 6000 euros por la geta y las arras (que esa es otra)...
Las arras!
Es ese contrato que haces una vez que has visto el piso y que te ha gustado y que si tienes pareja, y no le ha puesto pegas, hacen como “pa” reservarlo.
Bien, a alguien le han descontado alguna vez esa pasta que se queda ahí, en la inmobiliaria, del precio total del piso?
Bueno..., pues una vez que les dices tímidamente:
-Estoy interesado en un piso por la zona centro, a ver que tenéis!
El tipo, te mira como diciendo:
"Ya! Zona centro, claro!"
Y te suelta:
-Has hecho cálculos de cuanto dinero te puedes permitir pagar en una hipoteca?
-Pues sí...
Cuando le dices más o menos el presupuesto que tienes, entonces amablemente te muestran las ofertas que tienen de pisos, que como decirlo finamente..., se caen a pedazos!
O sea que cuando Franco era corneta, ya estaban en pie los pisitos!
Así que como tú no estás dispuesto a que te sangren vivo, te levantas y le dices que ya te lo pensarás...
Así estarás un par de meses, más o menos. Hasta que encuentras algo que te puedes permitir y que más o menos te guste.
Bueno, una vez que ya tienes piso, toca mudanza!
Y para ello reclutas a todos los amigos y enemigos que tienes, con la escusa de que:
“-cerveza fría no va a faltar!”
Así que cuela y ala! A mudarse se ha dicho!
No voy a entrar en la maravillosa e incesante serie de desastres en las que te ves envuelto al intentar meter un sofá de dos x un metro y medio por una escalera que no tiene ascensor, y que no está especialmente hecha a medida para tu sofá de diseño.
De diseño digo porque cuando al fin lo metes en el salón, el sofá ya no es como en un principio sino que ha adoptado una serie de formas irregulares en las esquinas propias de un Picasso y que hace una serie de sonidos que antes no hacía.
Así que tienes tu casa llena de un montón de seres ebrios porque empezaste a mudarte a las 9 de la mañana y son las 17h de la tarde y ahí están, celebrando tu nueva adquisición a base de cerveza helada, y recordando todas las mudanzas que han hecho a lo largo de su vida, como los abuelos en el pueblo!
Tienes tu sofá Picassiano y un montón de cajas que te miran diciéndote, espabila que tenemos complejo de Exín Castillo!
Bueno la primera noche en la que por fin duermes en tu casa nueva, que no suele ser la misma que la de la mudanza,(y menos mal porque con tremendo pedal acabas), te das cuenta de que te fijaste en que no hubiese humedades, de que no filtrases tú agua al vecino de abajo, de que la instalación de la luz fuese de este siglo... pero en lo que no caíste es que arriba habían vecinos. Vecinos jóvenes... Vecinos jóvenes... con niños.
Sí. Los niños son esas criaturas enternecedoras, a las que se la trae floja que tu curres de día o de noche, a las que les da lo mismo que te duela la cabeza y no quieras ni un solo sonido a tu alrededor y por supuesto a las que se la repampinfla que estés solo o acompañado!
Y es genial porque te das cuenta de que no a todo el mundo les tratan igual en los bancos.
No, no porque si nos tratasen igual los bancos que nos dan la hipotecas..., a todos nos darían la canica!
Claro, yo he pensado que quizá es que debes pasar un año o dos pagando hipoteca para que te la den!
De hecho cada vez que me llega un recibo de la santa hipoteca miro el sobre a ver si por un casual viene dentro la santa canica.
Pero no, debe ser requisito indispensable tener hijos para que te den una de esas bolitas de cristal autónomas las hijas de puta, porque no veas si corren las condenadas y te hace gracia la primera vez que la notas correr por tu techo...que piensas:"coño! hay costumbres que no se han perdido! Parece que todas las modas regresan!
Sí, los cojones!!!Son los bancos, los bancos que les dan las canicas a esos padres que viven encima de otro tipo que también paga hipoteca! Para qué? Para recordarte que pagues todos los meses!
Y claro tú no dejas de pensar..., y para cuándo mi canica?
Yo también quiero mi canica!!!
Que piensas:
"A lo mejor si me espero lo suficiente me regalan la canica, el niño “pa” usarla y por supuesto los zapatos de gitana a juego..., que coño! al igual tiran la casa por la ventana y me dan el lote completo que incluye llantera matinal!!
Y ya te imaginas por la rambla andando con tu caja... sí, de esas rollo lote de Navidad, con tu criatura dentro, la canica, los zapatos y el libro de instrucciones!
Eso sí, esta criatura tiene botón de desconexión!
Aunque si fuese yo..., lo tendría puesto siempre que yo no estuviese en casa, pa putear más!
Bueno, tal vez ahora con la revisión de la hipo, por pena me regalen la canica!
Por cierto…, como meten esa cosa rara que llevan dentro esas esferas de cristal?¿?




Con cariño a: Piel de Papel
03/03/08

3 comentarios:

Imaginari dijo...

para los que lo compran solo

para los que lo compran en pareja

para los que lo heredan

para los que heredan la hipotaca
de sus padres

para los que aun no se han atrevido

para los que les queda por pagar mas que a mi

para los que nunca se iran de casa de los padres

para todos ellos, suerte y al toro.

Bruja dijo...

Doy fe.
Y es una canica de record guiness.
Debe ser enorme la hija de puta.

piel de papel dijo...

Es enorme, Bruji, es enorme!!!